Cebolla caramelizada
Porque sabemos que eres un apasionado de la cebolla caramelizada, hemos recopilado para ti las mejores versiones de esta guarnición tan sabrosa. Es muy sencillo de hacer, y sabrá mucho mejor que la cebolla caramelizada comercial. La puedes poner de acompañamiento de carnes, aperitivos, pastas, pescados y verduras, nunca falla.
Una guarnición ideal para acompañar este listado de recetas de solomillo, o estas otras de atún con cebolla.
Hacer cebolla caramelizada
Hoy en día, la cebolla caramelizada forma parte de un gran número de elaboraciones gastronómicas como una excelente guarnición. Al principio fue utilizado sobre todo para acompañar a diferentes recetas con foie a la plancha pero hoy en día podemos utilizarla para acompañar pinchos y montaditos, carnes, tortillas o incluso pescados y mariscos.
La cebolla caramelizada combina muy bien con elaboraciones gastronómicas que tengan cierto toque salado, equilibrando ese sabor, y también con aquellas que cuenten con algo de grasa, como por ejemplo el foie. Si también quieres utilizar esta guarnición en tu casa, vamos a enseñarte cómo prepararla.

Se dice que con el método más tradicional se tarda más, pero el resultado es el más sabroso que se puede conseguir, por ello queremos enseñaros esta receta.
Ingredientes
- 3 cebollas medianas.
- 1 vaso pequeño de coñac.
- 50 gramos de azúcar moreno.
- Aceite de oliva virgen extra.
Preparación:
Limpiaremos bien las cebollas, quitándoles los bordes y la primera capa. Después las cortaremos a la mitad y las partiremos en juliana, pero no demasiado fina, de poco menos de medio centímetro aproximadamente.
En este caso se recomienda elegir las cebollas que son más dulces, para ayudar a una mejor caramelización.
En una sartén amplia echaremos un poco de aceite de oliva, aproximadamente una cucharada, y colocaremos toda la cebolla junto al azúcar. A más cebolla más aceite, pero sin echar demasiado porque la cebolla suelta agua, lo que contribuirá a caramelizarla.
La dejaremos a fuego suave y removiendo cada determinado tiempo, pero podremos olvidarnos de ellas durante un buen rato, por lo que podremos estar haciendo otras cosas por la casa.
Poco a poco, además de quedar completamente pochada, la cebolla ira adquiriendo el tradicional color dorado brillante y cuando llegue este momento, nuestra receta ya estará finalizada y podremos o reservarla en un plato o acompañar directamente a la comida. Seguro que no podréis resistiros a tomar solamente un poco.
Algunas sugerencias:
Si se hace más cebolla caramelizada que la que se va a consumir, no hay problema, porque podemos dejar que enfríe y utilizar un bote de conserva s vacío y limpio para guardarla, lo meteremos en el frigorífico y la volveremos a utilizar cuando lo necesitemos.
De esta forma, siempre que se vaya a hacer esta guarnición, lo más recomendable es hacer una buena cantidad la misma vez y tener reservas para no tener que prepararla de nuevo.
Si disfrutas en la cocina, te dejamos aquí las instrucciones para hacer guacamole casero y la mejor receta de ensaladilla rusa.