Empanada de cebolla caramelizada y queso de cabra

Receta ↓ Ángela Solar

Esta empanada de cebolla caramelizada y queso de cabra es una delicia, con una masa crujiente y suave y un relleno irresistiblemente sabroso. La combinación de la cebolla caramelizada dulce y el queso de cabra cremoso te dejará sin palabras. ¡Es una receta fácil y rápida de hacer, perfecta para impresionar a tus invitados!

Ingredientes que harán magia en tu cocina

Para que esta empanada de cebolla caramelizada y de cabra te quede de rechupete, vas a necesitar unos ingredientes que son puro amor. ¡Vamos allá!

• Cebolla: La estrella del plato, que se transforma en un caramelo vegetal que te hará cerrar los ojos de placer. ¡No escatimes en calidad!
• Azúcar: El toque dulce que, al unirse con la cebolla, crea esa combinación celestial. ¿Has probado con azúcar moreno? Te da un toque más rústico.
• Queso de cabra: Oh, ese sabor intenso que te transporta a las montañas. Combínalo y no querrás otra cosa.
• Masa de empanada: Aquí no hay medias tintas, una buena masa es la que te dará ese crujido adictivo. ¿Te atreves a hacerla tú mismo?
• Aceite de oliva: Es el alma del sofrito, el que lleva la batuta en el sabor. Un buen chorro de un aceite virgen extra y serás la envidia del vecindario.

Elaboración

¡Vamos a preparar la estrella de nuestra empanada! La cebolla caramelizada es una delicia y es muy fácil de hacer. Sigue estos pasos y conseguirás un sabor dulce y profundo que te encantará.

1. Empieza pochando la cebolla a fuego lento. ¿Por qué a fuego lento? Porque esto permitirá que las cebollas suelten sus azúcares naturales y se caramelicen lentamente, creando un sabor increíble.

2. Una vez que estén tiernas y doradas, añade el azúcar. Revuélvelo para que se integre y comience el proceso de caramelización. ¡Verás cómo tus cebollas adquieren un color dorado intenso y un sabor irresistible!

¡Vamos a darle forma a nuestra deliciosa empanada de cebolla caramelizada y queso de cabra! Sigue estos sencillos pasos y te aseguro que quedará perfecta.

1. Toma la masa para empanadas y extiéndela sobre una superficie plana y con harina. Recuerda que cuanto más fina, más crujiente quedará la empanada. Yo suelo dejarla con un grosor de unos 3 mm.
2. Después de extenderla, distribuye uniformemente la cebolla caramelizada sobre la mitad de la masa. No te preocupes si se desparrama un poco, ¡eso forma parte del encanto!
3. Ahora es el momento de añadir el queso de cabra desmenuzado encima. Personalmente, adoro utilizar un queso de cabra fresco, pero si es tu gusto, puedes optar por uno más curado. ¡Elige el que más te guste!
4. Dobla la masa sobre el relleno, presionando los bordes para sellar la empanada. Asegúrate de que quede bien sellada para evitar que el relleno se salga durante el horneado.
5. Finalmente, adorna el borde presionando con un tenedor o usando un cortador de pizzas para crear un patrón. Yo siempre opto por el tenedor, ¡me recuerda a las empanadas que hacía mi abuela!

¡Horneemos nuestra empanada a la perfección! El horneado es una parte crucial para obtener una empanada crujiente y dorada que te dejará con ganas de más. Personalmente, me encanta el sonido que produce al crujir al morderla.

Prepara el horno a 180°C y asegúrate de que esté bien caliente antes de introducirla. Esto ayudará a que se cocine uniformemente y obtengas ese crujiente que tanto deseas.

Coloca en una bandeja para hornear forrada con papel vegetal y hornea durante aproximadamente 25-30 minutos, o hasta que la masa esté dorada y crujiente. ¡No te olvides de vigilarla para evitar que se queme!